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domingo, 10 de junio de 2012

8 de junio. Mary-Turkmenabat. TURKMENISTAN (Día 3). Karakum 1 Angel 0




"He venido al desierto para irme de tu amor,
que el desierto es mas tierno y la espina besa mejor,
he venido a ese centro de la nada para gritar,

que tu nunca mereciste lo que tanto quise dar.



He venido yo corriendo olvidandome de ti,

dame un beso pajarillo y no te asustes colibrí,

he venido encendido al desierto para quemar,

porque el alma prende fuego cuando deja de amar".



Letra de la canción "El Desierto"" (Lhasa)






A las 4:30am aporrean mi puerta despertándome. Me traen el desayuno, tres cuartos de hora antes de lo pactado...la madre que las parió!


A las 5:30am estoy abandonando Mary por las grandes avenidas con estética rusa. La carretera parece que mejora sustancialmente, pero mi culo empeora sustancialmente.


A las 4h y media de pedaleo ya llevo recorridos unos 80km y me escondo en una especie de marquesina de hormigón parecida a las de las paradas de autobús, pero esta en medio del desierto. Debo esconderme del sol como las alimañas y volver a reanudar cuando el Lorenzo apriete menos, así que me toca pasar unas cuantas horas en este lugar...A las 3 horas el sol me ha arrinconado contra la pared y ya no estoy cómodo. Las moscas no me han dejado dormir ni relajarme un momento.


Las 15h. no es buena hora para salir pero ya estoy cansado de estar aquí y salgo con la esperanza de encontrar otro lugar mejor...sin moscas. El sol pica con la rabia de sus 45º, de echo pica hasta que se esconde.


Al sentarme en la bici noto los pinchazos en el culo. Es como salir a correr con chinchetas dentro de las zapatillas. No puedo sentarme más de dos minutos y recorro practicamente unos 40km levantándome y sentándome con una nalga apoyada y la otra en el aire o sentado en la punta del sillín. Busco maneras de evitar ese dolor punzante. Por efecto de las malas posiciones se me cargan las rodillas. Bajo un arco de carretera unas mujeres comercian con agua y ayran granizado. Me compro una botella y me cobijo durante una hora bajo la sombra de una columna. Me dicen que a 60km hay un caffe donde puedo pasar la noche. Llevo 140km pero son las 18h y pienso que si me lo tomo con calma puedo llegar antes de que anochezca del todo. Así sólo me quedaría 40km hasta Turkmenabat para mañana.


Al subirme de nuevo en la bici me doy cuenta que no voy a poder hacer ni dos km.


Empiezo a valorar mi situación (con un culo palpitando de dolor no se piensa bien, pero tengo que hacerlo).


Me quedan dos días de visado en Turkmenistan, si me expira el visado y no he salido del país tengo o bien que pagar una multa de 200$ (que no tengo) o ser deportado (no se si a Uzbekistan o a Irán...pero no quiero arriesgarme) y ese tipo de problemas con esta policía no me apetece nada. Así que si paso la noche aquí, mañana corro el riesgo de no alcanzar Turkmenabat, dejando para el último día la incógnita de si llego o no llego a la frontera. Mi culo pide la palabra y dice que él necesitaría una ducha y jabón para limpiar esas heridas. El viento aparece de caras dando su opinión. Un viento que arrastra ráfagas de arena que pica en la cara y brazos y a pesar de llevar gafas te obliga a cerrar los ojos...Estoy con esos pensamientos cuando un camión de gran tonelaje con caja abierta y transportando palés de no se que, se para a comprar agua y desde la cabina, con gestos me dice ¿a donde vas? ¿te vienes con nosotros? Mi subconsciente le dice que si y en tres minutos tenemos la bici cargada encima de los palés y las alforjas en la cabina. Acabo de vender mi alma al diablo, he traicionado mis principios de alcanzar Pekín con mi propio esfuerzo (de echo ya lo había traicionado en alguna otra ocasión metiendo la bici en un bote en Estambul para cruzar el Bósforo, en una furgo para recular los 90km que hice cuando el puerto de montaña en Trabzon estaba cerrado...lo comido por lo servido, pienso).


En el camión un chico joven (Kemal) y su mujer y el conductor. Hablamos largo y tendido con ayuda del traductor del móvil del chico. Soy testigo de como trabaja la poli aquí. Nos paran en tres controles. El conductor baja con los papeles y con dos Manats (un dolar aprox.). Se los entrega al poli y proseguimos el viaje. Llegamos a Turkmenabat y me invitan a cenar en casa de Kemal y después el mismo Kemal coge un taxi para acompañarme hasta el hotel (está prohibido dar alojamiento a los ciudadanos y aparte los viajeros necesitamos estar registrados al menos cada tres días en un hotel para evitar molestias con la poli). Llegamos al hotel y no tienen habitaciones. Pero detras hay otro lugar infesto que no merece ni la "H" de hotel. El más cutre y escalofriante hasta la fecha. Me cobra 18$ y los pago porque no tengo fuerzas ni ánimos de recorrer de noche la ciudad buscando otro hotel y no quiero robar más tiempo a Kemal. Me despido de él, e intento pagarle lo que se ha gastado en taxi, pero se niega rotundamente. Que gran persona este Kemal. He avanzado 100km, mañana en 35km estaré saliendo de Tuerkmenistan un día antes de lo previsto, por lo que gano un día en Uzbekistan (que ya llevo desperdiciados 6 de mi visado Uzbeko), he evitado el sufrimiento de un día mas en este desierto y he conocido a un gran tipo...¿No se trata de eso el viajar?






Lo peor: Acabar el partido desde el banquillo de un camión...
Lo mejor: Kemal por sacarme del desierto del Karakum y regalarme un día más en los verdes pastos de Uzbekistan.




Etapa dedicada a Manu Resina, amigo, seguidor de mis andanzas y camionero al que le complacerá el gesto de Kemal. (Manu, no hace falta que me lo agradezcas con una de tus parrafadas, jajaja).






Distancia: 240km (de los cuales 100km son en camión)   Tiempo: 7h 20min    Vel.Media: 18,4 Vel.Max: 30,1

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