Seleccionar idioma

martes, 10 de abril de 2012

10 de abril. Çorlu-Gümüsyaka. "¡Somos aventureros o somos golosinas"


Hoy a pesar que la previsión daba un 50% de posibilidad de precipitación y viento nordeste, he decidido salir, primero, para no abusar más de la hospitalidad de Akif y Asya (los cuales, por otro lado, insistían en que me quedara un día más) y segundo porque a 115 km me espera Estambul donde ya voy a descansar un par días más.


Hace frío, 7º y el cielo está gris, pero no llueve. Desayuno con Asya y emprendo la ruta a las 10h. A los 15 minutos empieza a lloviznar y me paro a sacar el chubasquero. A los 25 minutos estoy muerto de frío, me cobijo en una gasolinera y me tomo un té caliente. Continuo, sigue lloviznando y los camiones, buses y todo vehículo motorizado que pasa por mi lado me escupe el agua pulverizada de la carretera. Un infierno para un ciclista; frió, lluvia, viento, tráfico...sólo faltaban los perros. Pienso en los alpinistas de los 8 miles, que esperan en el campamento el momento propicio para atacar la cumbre y yo veo a Estambul como una cumbre que se me resiste, y debía haber hecho como los alpinistas, esperar. Pago muy caro el precio de mi decisión. Pero aprieto los dientes y me digo, ¿somos hombres o golosinas?......uh...golosinas! En concreto una de esas nubes rosaditas y esponjosas pero tirada en la carretera. Y así me han tenido que ver unos chicos que han pasado con una furgoneta, que han parado y me han ofrecido cargar la bici y acercarme a un hotel a 10km. He aceptado sin rechistar, me estaba jugando el pellejo por una mala decisión. Doy por concluida la etapa.


Olvidé por un momento que ante todo estoy aquí para disfrutar, y hoy no era día para disfrutar encima de la bicicleta y menos para entrar con estas condiciones en la caótica Estambul de 11 millones de habitantes.


Cómo en un restaurante al lado del hotel que parece ser es sala de fiestas o discoteca los fines de semana...Vuelvo para cenar al mismo lugar (no hay otro) y todo está cambiado, hay un segurata en la puerta, música en vivo, luces tenues y un montón de chicas...le pregunto al camarero con mi super aplicación del iphone, que hacen tantas chicas aquí, y me responde ambiguamente "que los clientes ya saben lo que son". Yo le vuelvo a escribir que en España se le llaman prostitutas. Empiezan a llegar tíos raros, con actitudes raras y yo comiéndome un bistec con patatas allí en medio bajo la mirada pescadora de algunas chicas. Engullo el bistec, pago y me voy. Al volver al hotel entiendo porque en la puerta hay un detector de metales. Esta noche me espera crujir de muelles de somier, golpes de cabecera de cama, jadeos, suspiros, quejidos y algún que otro aullido.





Lo peor: Todo, menos los chicos que me han ayudado.

Lo mejor: Descubrir que se rectificar.





Distancia: 29,5km                           Tiempo: 1h 30min

Vel. media: 19                                 Vel max: 33,2

2 comentarios:

  1. me encanta lo mejor de la etapa! Lo peor no tanto...

    ResponderEliminar
  2. vaya, pasar la noche ...a la turca, vigila no vayas a perder algún pedal...bribón!

    ResponderEliminar