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miércoles, 9 de mayo de 2012

8 de mayo. Miyaneh-Zanjan. "El miserable"




Esta mañana ya me han hecho cabrear. El miserable de la recepción del hotel me dice al irme que tengo que pagar 2000 riales por la ducha (estaba fuera de la habitación y tenias que pedir la llave). Le digo que ahora no es honesto decirme que tengo que pagar por ducharme. Le pregunto entonces donde se sirve el desayuno y me dice que son 3000 riales por el desayuno. Le digo que ayer pregunté si el desayuno estaba incluido en el precio y su compañero me dijo que sí. Entonces con un "ok" de cabreo-resignación me invita a pasar al comedor...Total para dos huevos fritos y un té de bolsita.

Si ayer me encontraba con gente majísima, hoy nada más empezar el día me topo con este hijo de puta, porque además los que lo son tienen cara de ello. Como si la práctica del hijo putismo te transformara la cara.

Salgo enervado pero en seguida se me pasa en cuanto veo las montañas de esta zona de Irán en primavera. Esas verdes colinas se mezclan con montículos terrosos con mil tonalidades de ocres, atravesadas por esos ríos café con leche y ese cielo azul pitufo salpicado de nubes lavadas con Perlan.

No esperaba pagar tan pronto el peaje de la etapa de ayer. Si ayer me pasé 100km bajando suave, hoy lo propio pero subiendo.

He rodado por una "V". Ayer por el palo que baja y hoy por el palo que sube. Sin mencionar el viento sur que me da de cara y me congestiona las piernas.

Hoy atravesaba una zona desértica donde de repente y a causa del paso de un rio, se aglutinaba alrededor campos de cultivo de arroz y he visto una cosa rara. En una caseta de metro por metro un hombre desde el interior de la puerta de hierro me hacía señas para que le diese agua. Estaba encerrado pro no hacia ni dos segundo una moto con dos tipos salía del camino de la caseta...cosas raras.

Llegar a Zanjan es un prioridad, primero porque tengo posibilidad de alojamiento y segundo porque necesito llegar a Teherán el viernes si no quiero morir asfixiado o atropellado por los 14 millones de coches. El viernes es el domingo para los iranís y el tráfico en Teherán es infinitamente menor que un día entre semana. Así que el viernes es el día.

A ver quien encuentra un coche que hay escondido en esta foto

Encuentro un hotel en condiciones y la ducha es algo reparador después de tantos km. Ceno un kebap, escribo el cuaderno de viaje y a dormir.



Lo peor: Los miserables que se aprovechan del desconocimiento, ingenuidad y confusión de los demás.

Lo mejor: Atravesar estos desiertos reverdecidos por las recientes lluvias de primavera con la música de Yann Tiersen en mis orejas...un deleite para los sentidos.



Hoy va dedicada a mi amiga Ruth a la que deseo que en su "Cafetó 2.0" no entre nunca un miserable.



Distancia: 131km Tiempo: 6h 25min. Vel.media: 20 Vel. max: 35,7


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